![]() |
Foto: Europa Press, 7 de febrero de 2019 |
El alcalde de Zaragoza, Pedro SANTISTEVE, asistirá este sábado, 9 de febrero,
en Roma a la reunión de ciudades refugio convocada por OPEN ARMS en Roma, en la que participarán alcaldes y alcaldesas de
importantes capitales españolas, alemanas e italianas. Zaragoza forma parte de la Red de Ciudades Refugio y acude a este
evento auspiciado por OPEN ARMS, con
la finalidad de poner en común y conocer las experiencias de las ciudades en
política de refugiados, además de coordinar posibles acciones para movilizar a
los gobiernos centrales, como ya trasladó la vicealcaldesa, Luisa BROTO, el
pasado mes de noviembre.
Las
ciudades españolas de esta Red reclaman
a la Secretaría
de Estado de Migraciones que se equiparen los ayuntamientos con las ONGs para
concertar directamente con el gobierno central la entrada de refugiados, ha
señalado el alcalde de Zaragoza. Sin embargo, él mismo ha reconocido que en estos
momentos llegan más refugiados de países como El Salvador, Nicaragua y
Venezuela, y no de Siria, que era el país cuya crisis humanitaria determinó los
acuerdos suscritos por la
Unión Europea en 2015 y la firma de la Declaración de Barcelona en 2017. Del contingente
de solicitantes de asilo asignado inicialmente a Aragón, más de 1.000 personas,
han llegado tan sólo, según reconoce el propio edil zaragozano, entre 200 y
300. Sin embargo, el número de personas procedentes de otros países, no
precisamente de Siria, ni tampoco de Venezuela, Nicaragua o El Salvador sigue
creciendo a buen ritmo.
Quizá
algunos somos muy malpensados y
creemos tener motivos para pensar que algunos partidos políticos – estamos
visualizando continuamente propaganda electoral que corrobora nuestras
sospechas - están tratando de conseguir los votos que no logran entre sus
paisanos, trayéndolos de donde haga
falta, so pretexto de razones humanitarias o de solidaridad. Es relativamente
fácil y eficaz capturar el voto de personas a las que se ofrece la regularización
de su situación, aprovechándose de su situación de necesidad y de su
vulnerabilidad, pero también es un auténtico fraude a la veneranda democracia y una muestra de cinismo y de hipocresía que
encuentra muy difícilmente parangón en nuestra historia reciente.
La ciencia avanza que es una barbaridad, reza el viejo dicho, y la
técnica – la tecnología -, mucho más. Ahora, se ha logrado muñir un híbrido
entre lázaro y cunero que permite usar para el pucherazo no la identidad de los
difuntos, ni a un candidato traído a lazo desde un lugar remoto y desconocido,
sino masas ingentes de dóciles votantes a los que se inscribe precipitadamente
en un censo configurado ad hoc para
conseguir que el artificio electorero produzca el resultado pretendido.
Que se
auxilie a los refugiados de verdad y que, para ello, las autoridades
constituidas colaboren de la mejor manera posible. Que al mismo tiempo se
reconozca también como refugiados a quienes realmente lo son pero tienen la
desgracia de haber huido de países en los que los gobiernos, materialmente
tiránicos en igual o mayor medida que otros, tienen cierta patente de corso para seguir cometiendo fechorías en nombre de una
siniestra corrección política.
R. P.
P.S. Es curioso que los
cristianos perseguidos en tierras de Siria no suelen pedir asilo en países
europeos, aunque es muy probable que no tuvieran muy buena acogida, salvo, cómo
no, en Hungría o en Polonia, todo ello de nuevo en nombre de una extraña
corrección política imperante.
Comentarios