Viendo esta imagen en las redes sociales, llega un momento en que la realidad supera a la ficción. Si a uno no le gusta la tauromaquia nadie le obliga a ir a las corridas de toros, igual que si no te gusta un programa de televisión puedes cambiar de canal o apagar directamente el televisor.
A qué límites ha llegado nuestra sociedad en que se presenta a las elecciones generales un partido contra el maltrato animal y apenas en la mayoría de los programas de los partidos políticos actuales aparezcan referencias a la protección de la vida humana y el no nacido. Actualmente, hay una tendencia en que determinadas personas tratan a sus mascotas como si fueran miembros de su familia, lo que demuestra una involución y una falta de madurez personal.
En definitiva, una muestra más de la falta de valores y actitudes existente en nuestra cultura que confirma el camino de degradación que está siguiendo nuestro país en este sentido.
Por cierto que un partido animalista de estos, el PACMA, en un vídeo electoral, para hacer gala de su valentía y amor por los animales, la candidata da de comer a un "toro bravo de 900 kilos" con la mano demostrando ignorancia o mala fe pues se trata de un buey. Ya me gustaría ver a esta señora con un toro bravo de verdad. Pueden ver más detalles del caso y el vídeo aquí.
El aragonés audaz
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