A VUELTAS CON TURISMO DE ZARAGOZA…


El Heraldo de Aragón publicó el pasado 19 de diciembre la siguiente noticia: “La vicealcaldesa ficha a un ex-dirigente de Cs para llevar el patronato de turismo”.

En el citado artículo, Sara Fernández, vicealcaldesa de Zaragoza, hace referencia a este nombramiento por designación directa, justificado por su trayectoria como responsable de marketing. “También es licenciado en derecho y reúne el perfil adecuado para la promoción turística de la ciudad”, añadió la política.

Según relata la noticia, Podemos – Equo planteó una moción para renunciar a la elección a dedo de puestos técnicos “como la gerencia de patronatos”, con lo que la formación naranja votará en contra de la misma cuando el nombramiento se haga oficial próximamente en el Gobierno de la ciudad.

Por otra parte, con fecha 22 de abril de 2016, este mismo diario publicaba en su edición digital la siguiente noticia: “Enrique Pérez Ruiz, nuevo gerente de Zaragoza Turismo”.

En este caso, se trataba de un contrato de relevo al 75% de la jornada laboral, para cubrir la plaza de director, como consecuencia de la jubilación parcial de la anterior gerente. Al tratarse de este tipo de contrato, ha sido el Instituto Aragonés de Empleo (INAEM) el encargado de realizar el proceso de selección, según detallaba el artículo.

Además, sin entrar en mayores disquisiciones para no aburrir a nuestros lectores, esta persona tenía una formación y una experiencia en la administración pública completamente relacionada con el perfil requerido para el puesto. Según lo expuesto hasta el momento, puedo realizar las siguientes conclusiones:

- Por un lado, siempre es más transparente, efectivo y ético un proceso de selección realizado conforme a los principios de mérito, igualdad y capacidad requeridos para el empleo público, más si cabe en este caso realizado por el Servicio Público de Empleo para estas circunstancias, que “debe servir para algo”.

- Por otro lado, podemos observar cómo los puestos de alta dirección en las administraciones públicas, como es el caso, se han convertido en un refugio para “enchufar” a dirigentes políticos que se han quedado sin “empleo”, es decir, sin poder seguir viviendo del cuento.

Por tanto, vamos comprobando a través de los medios de comunicación cómo estos puestos necesitados de una gran competencia y valía técnica son ocupados por el “enchufado de turno” que pasaba por allí, por mucha justificación rimbombante que se le quiera otorgar para adornar estos atropellos flagrantes a la ciudadanía. En fin, así nos va…

El aragonés audaz

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